"Memoria emotiva" -Cuento corto-

Luciano descubrió que cada vez que entraba a una juguetería debía elegir querer algo. Por ejemplo aquel muñeco. El problema era que había muchos, todos iguales, todos puestos como un ejército sentado. Pero Luciano sabía que uno debía ser suyo. Y estaba minutos y minutos intentando decidirse. No comprendía con sus 4 años que si quería algo había mucho, y no “ese solo” para él. De noche soñó una juguetería que sólo tuviera un solo producto de cada cosa que él quisiera. Y que cuando se fuera hubiera que poner otra juguetería. Todo esto lo recordó hoy por la mañana. Necesitaba un clavo para colgar un cuadro. Fue a la ferretería, pidió el bendito clavo y le trajeron 100 iguales. Nunca supo cuál era el suyo. Se quedó pensando, recordando aquel muchacho que elegía un muñeco, que elegía entre tantos. Sin temor a equivocarse. Con temor, hoy, a los clavos.

1 comentarios:

Gabriel dijo...

“Memoria emotiva”-Cuento corto. Un muñeco y un clavo. Mas o menos lo mismo en los recuerdos desordenados de nuestra mente. Cuando pasan los años.