"Lo que guarda en ella" -Cuento corto-

Compró una caja de regalos. Esas de cartón corrugado, que se hacen enseguida y se venden en el supermercado. Armó con esmero sin seguir instrucciones, las piezas encajaban solas unas con otras y parecía saberlo. Por la madrugada terminó la obra decorándola, con un papel de dibujos búlgaros rojos y celestes que no le gustaban pero no tenía mucho que elegir. Se fue a dormir para descansar de esa extraña rutina. Por la mañana fue a ver su obra a la cocina. Arriba de la mesa estaba la caja de regalos. Desayunó con ella al lado, vestido para salir y sin dejar de pensar en que podría haberla hecho mejor, lucía chueca. La puso bajo el brazo, salió a la calle con ella. Se tomó el 132, bajó en Paraguay y Suipacha, caminó unas tres cuadras. La gente lo miraba porque le costaba manejarla, incómoda y cuadrada. Llegó a su oficina y la puso debajo de la mesa. Pasó el dia y a la tarde de nuevo la incómoda amiga. El colectivo más repleto de gente y la caja quedó menos cuadrada y más abollada. Otra vez ya en la casa, la dejó sobre la cama y la miraba mientras se aflojaba la corbata. Se fue a bañar. Volvió y quiso moverla pero la caja pesaba, necesitó las dos manos para ponerla en el suelo y acostarse persiguiendo sueños. Como ese que recordó hace un tiempo, en donde una mujer le decía que los problemas se van si uno sabe donde ponerlos. Que use una caja grande durante un dia entero, que iba a ver que a la noche de tan pesada, complicada sería moverla. Se puso las pantuflas y fue a abrir la puerta. Sacó la caja y la apoyó en el poste, se la quedó mirando tras la ventana. El camión de residuos en madrugada se llevó la caja de problemas, diaria. Y todos los días armaba otra, aunque de a poco más ligeras. El método del hombre para dejar de tener problemas ganó adeptos. “Barrio de las cajas”, le dicen a su cuadra entera. Cuando a la noche todos sacan de sus casas eso que les molesta.

1 comentarios:

Gabriel dijo...

“Lo que guarda en ella”-Cuento corto. Un hombre quiere combatir eso que le pesa y aqueja, decide seguir un sueño que terminó siendo terapia entera de un barrio cualquiera. El de las cajas que guardan problemas.