"Flores, celestes pasos" -Cuento corto-

Probó dejar huellas en el camino para que ella las siguiera. No sabía si estaba atrás o adelante de la mujer que lo desvelaba, entonces pudo ver una especie de grieta a cubierto del sol y algún tipo de arbusto con flores celestes. Tomó unas diez, más no había. Siguió caminando y resolvió al rato dejar una en el piso como señal. A prudente cantidad de metros dejó otra. Y asi hasta que le quedó una sola. Miro hacia el cielo y vislumbró la peor noticia para quien quiere ser encontrado en un camino: empezó a llover de manera infernal, descarada. Pudo protegerse debajo de unas ramas, se guardó la flor que le quedaba y lloró un poco, con esas lágrimas que corrían confundidas con agua de lluvia. Daba lo mismo. Se puso los brazos sobre su cabeza para dejar de pensar en ella pero no pudo, y se quedó de pie hasta que amainó la tormenta. Salió de nuevo al camino algo mojado y el alma en pena. Guardó en el bolsillo la flor que le había quedado, estaba perjudicada por el tiempo. La tomó entre sus dedos y la dejó sobre una piedra, soltándola y acariciándola. Durante un rato nada le importó, como si por nada estuviera respirando, tenía la resignación del que no llegó a ningún lado. Se sentó en el suelo y se tomó la cabeza con sus brazos. Una mano tibia le levanta la frente y cree estar soñando. Al ver a aquella mujer con diez flores celestes, incandescentes. Todo esto lo recuerda cuando ambos en el patio miran juntos crecer las flores de su camino. El que ahora de futuro, es presente. El que ya fue encontrado.

1 comentarios:

Gabriel dijo...

“Flores, celestes pasos”-Cuento corto. La imposibilidad de saber si estamos buscando a alguien o en realidad estamos siendo buscados. La diferencia está en sentir lo que se hace para tener señales a mano. Como flores celestes.