."Era obvio".

El sentimiento carece de explicaciones concretas. Una vez quise explicarme por qué te quería tanto. Y fracasé, tengo que decirte. Porque me pierdo en innumerables recodos, en caminos que no llegan a ningún lado, que chocan y se juntan sin darme razones. Soy terco, tiene que haber alguna clave racional para el amor. Me empeñé, me esforcé como en casi nada de mi vida. Hace dos meses que cuando te veo recuerdo todo lo que me costó encontrar la razón de mi amor por vos. Y la encontré, vida: porque sí.

1 comentarios:

Gabriel dijo...

Pensamientos que nacen cuando caer la noche.