."Rezando".

Extraño que me hables en silencio. Cuando dejás que mi mente imagine momentos que nunca tuve por ciertos pero que huelen con la dulzura del chocolate en invierno. Que alivian la carga del recuerdo, que siento, me sienten, me saben a aquellos que siempre dijimos algún dia serían nuestros. No quiero quedarme sólo con eso, el placer de los ojos que invitan al viento a bajar su ritmo en latidos y en respeto. Extraño sentirte, sin haber sentido primero. Extraño quererte, y siempre te estoy queriendo. Extraño me hables. Me hables en silencio.

1 comentarios:

Gabriel dijo...

Pensamientos que nacen cuando cae la noche.